La economía de El Salvador está volviendo a sus niveles históricos de crecimiento, aseguró este día la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) durante una conferencia de prensa. Según datos oficiales del Banco Central de Reserva (BCR), el producto interno bruto (PIB) de nuestro país creció un 2.4% durante el primer trimestre del 2022, con respecto al mismo periodo del 2021. La última proyección de dicha entidad apunta a que cerrará el 2022 con un crecimiento anual del PIB del 2.6%.
“Como Camarasal vemos positivo que nuestro país continúe creciendo en este contexto complicado no solo para la economía nacional, sino internacional. Vemos, además, que las tasas de crecimiento económico que estamos reportando son las mismas que el país ha estado experimentando durante los últimos 10 años. En este periodo, este crecimiento se ve impulsando principalmente por algunas actividades del sector servicios”, expresó la directora de Asuntos Técnicos de Camarasal, Yesenia Salas
Con respecto al 2021, los subsectores que han reportado mayor crecimiento durante el primer trimestre de 2022 son actividades artísticas y recreativas (13.1%), alojamiento y servicios de comida (11.6%) y el transporte y almacenamiento (10.5%). Por otro lado, los que han mostrado mayor contracción durante el mismo periodo son la explotación de minas y canteras (-27.5%), la construcción (-4.8%), y las actividades profesionales, científicas y técnicas (-2.3%).
Inflación importada
Por su parte, la Camarasal también expresó que El Salvador, como muchos otros países, está experimentando una inflación importada, ya que está fuertemente relacionada con factores externos, como el alza de precios de los commodities, producto de la invasión de Rusia a Ucrania, y las problemáticas en la cadena de suministros. La inflación anual a mayo de 2022 con respecto al 2021 alcanzó un 7.5%.
El componente de alimentos y bebidas no alcohólicas ha sido el que mayor aumento inflacionario ha experimentado, lo que apunta a que la población salvadoreña está encontrando en los mercados y supermercados precios más altos en la mayoría de los productos alimenticios, tal como anticipó la gremial, meses atrás, al explicar que la eliminación del impuesto a la importación de cerca de 20 productos de la canasta básica tendría un efecto modesto o casi nulo en la reducción de precios. Esto debido a que muchos de estos productos tradicionalmente provienen de países centroamericanos que ya cuentan con una exención del impuesto a la importación gracias a los tratados de libre comercio vigentes.
Con respecto a los precios al consumidor de los combustibles, Camarasal acotó que están significativamente por debajo por debajo de los precios de mercado, producto de las medidas implementadas por el Gobierno de El Salvador (GOES), que han consistido en la reducción de impuestos y el congelamiento de precios. Al respecto, Yesenia Salas, directora de Asuntos Técnicos de Camarasal, aseveró que “si bien es cierto esta es una medida que ha traído alivio a los consumidores, y en momentos complicados como estos se requieren políticas expansivas, debemos recordar que esta diferencia de precios aumenta el gasto público y genera presión en las cuentas del Estado, haciendo indispensable contar con finanzas públicas sanas”.
Mayor déficit comercial
En el tema de comercio exterior, Camarasal apuntó que El Salvador acumuló un incremento en el déficit comercial de $244.2 millones de enero a mayo de 2022, lo que representa un crecimiento de 39.5%, respecto al mismo período de 2021, de acuerdo con los últimos datos del BCR.
Las exportaciones acumuladas entre enero y mayo de 2022 tuvieron un crecimiento nominal (dinero) del 17% con respecto al mismo período del 2021, explicado principalmente por los incrementos de precios. Sin embargo, en volumen las exportaciones han caído un 2.1%. Por su parte, las importaciones para este mismo período muestran un crecimiento tanto en dinero (27.7%) como en volumen (3%).
El déficit comercial de El Salvador, expresó la Camarasal, releja un problema estructural y la necesidad de implementar políticas que fortalezcan al sector exportador como una de las apuestas para impulsar el crecimiento del país.
Créditos más caros para las empresas
La gremial también explicó que los créditos totales, a mayo de 2022, presentaron un aumento de 8.5% comparado con el mismo mes del año anterior, y que particularmente los destinados al sector productivo crecieron un 49.5% para el mismo período.
Sin embargo, destacó que también crecieron las tasas de interés de créditos a más de un año para las empresas. Estas, a mayo de 2022, se situaron en 8.7%, esto es 1.7 puntos porcentuales más que la tasa registrada en el mismo mes de 2021, según cifras del BCR.
Sumado a lo anterior, la Reserva Federal de Estados Unidos ha publicado, en el transcurso del 2022, tres incrementos en las tasas de referencia que suman 1.5 puntos porcentuales, lo que podría generar mayor presión sobre las tasas de interés en El Salvador.
“Esto nos dice que para las empresas adquirir un préstamo a un plazo mayor a un año es más caro, por lo que estas deben cuidar su liquidez y el financiamiento de su capital de trabajo”, explicó Salas.
Finanzas públicas
En otro punto, Camarasal también hizo un llamado al GOES a priorizar los destinos del gasto y a cuidar la sostenibilidad de las finanzas públicas. Según datos del BCR, los ingresos del gobierno, de enero a mayo del 2022, crecieron en $539.62 millones comparado al mismo periodo del 2021, mientras que el gasto corriente creció $132 millones. Sin embargo, al analizar el comportamiento mensual de los ingresos y gastos, prácticamente de enero de 2021 a mayo de 2022, el gasto corriente se mantuvo por encima de los ingresos tributarios netos, con excepción de los meses de abril de 2021 y 2022 (que corresponden al periodo de cierre de pagos del ISR) y mayo del 2022.
La gremial enfatizó que las fuentes de financiamiento para el Estado son impuestos o deuda, y que esta última continúa con una tendencia al alza desde 2020. A mayo de 2022, el saldo de la deuda del país se encuentra en $24,579.5 millones con un crecimiento anual de 5.5% con respecto al mismo mes del 2021.
Al respecto, Hasbún explicó que “en tanto se esté complicando la obtención de deuda para el Estado, se genera una mayor presión a la liquidez. En la medida en que este tenga menos disponibilidad de liquidez, deberá recortar gastos e inversión”.
Camarasal también destacó que, a partir de 2020, el indicador de bonos de mercados emergentes EMBI (por sus siglas en inglés) ha tendido al alza. Al 30 de junio de 2022 alcanzó un índice de riesgo de 27.04. Esto ubica a El Salvador como el país con el mayor EMBI en América Latina, por encima de Argentina.
La gremial explicó que mientras más alto sea el EMBI, los inversionistas exigirán una mayor prima o tasa por adquirir los bonos u otros instrumentos de deuda del Estado.
Finalmente, la Cámara hizo un llamado al GOES a estructurar un plan de crecimiento económico y de desarrollo integral para el país que involucre a todos los actores, tenga a la base el respeto a la democracia y el Estado de Derecho, y se estructure en torno a cuatro pilares: educación, salud de calidad, facilitación del comercio e inversión y sostenibilidad fiscal.
San Salvador, 05 de julio de 2022.