Empresas agremiadas a la Cámara de Comercio e Industria estimaron una pérdida de ingresos por ventas de 75% o más durante la primera semana de emergencia por la pandemia del COVID-19, según reveló un sondeo realizada por la gremial entre el 17 y 23 de marzo.
La encuesta fue respondida por una muestra de 301 empresas (91% mipymes) que representan el 14% de la membrecía de la gremial y refleja el impacto que las medidas de emergencia están teniendo, tanto en la productividad del país como en los empleos.
“El 85% de los empresarios encuestados aseguraron haber sufrido una baja en su nivel de ventas”, dijo Jorge Hasbún, presidente de la gremial al dar a conocer los datos de la encuesta durante una conferencia de prensa.
El dirigente gremial añadió que de los empresarios que han sufrido baja de ingresos, el 50% reporta una disminución de ingresos por venta de entre 75% o más. “Esto es grave, porque de las empresas dependen los empleos de cientos de miles de salvadoreños, y si el periodo de bajas ventas se prolonga mucho, los empleos corren peligro”, afirmó Hasbún.
El sondeo también refleja que el sector más golpeado al inicio de las medidas ha sido el de servicios, ya que el 69% de las empresas de este rubro afirma haber sufrido una baja de ingresos por venta de más del 75%, solo en la primera semana de las medidas iniciales.
Al ser consultados sobre otros impactos que las medidas de emergencia han causado en los negocios, el 38% indica una reducción de las operaciones, el 23% reportó como impacto importante el aumento de costos de producción (gastos operativos, compra de insumos, transporte, servicios básicos para operar), y el 20% indicó haber tenido problemas para adquirir insumos para la producción.
No obstante, los efectos de las medidas, el 93% de los empresarios encuestados las consideraron adecuadas y necesarias para resguardar la salud de la población.
“Esto nos indica que los empresarios no estaban en contra de las primeras medidas impuestas, asumiendo el efecto de las mismas. Será interesante medir esto a partir de la cuarentena nacional”, comentó el presidente de CAMARASAL.
Lo anterior se refleja en que el hecho que el 99.3 % de los empresarios encuestados afirmaron haber acatado las medidas sanitarias establecidas por el Gobierno al inicio del estado de excepción, como intensificar las medidas sanitarias al interior de las empresas (26.2%), enviar a casa a personal bajo riesgo (20%), reducir operaciones (17%) e implementar el teletrabajo (16%).
Sin embargo, al consultar sobre las medidas que se verían obligados a tomar si el periodo de emergencia se prolongara por tres semanas más, el 28% dijo que tendría que reducir operaciones, el 27% respondió que reduciría personal, el 21% que suspendería operaciones, el 10% que cerraría sucursales y el 8% se inclinó por un cierre definitivo. Solo el 2% de los encuestados afirmó que podría seguir trabajando igual a antes de la emergencia.
El presidente de CAMARASAL concluyó haciendo un llamado a la unidad nacional y a la búsqueda de consensos entre el gobierno y el sector productivo para diseñar un plan de salvataje del empleo, que garantice la conservación de las fuentes de empleo y la vuelta a la normalidad una vez concluida la pandemia.