El Salvador será la sede de la X Convención Centroamericana y del Caribe de Centros de Arbitraje, que se realizará en formato totalmente virtual entre el 23 y el 27 de noviembre de 2020.
Bajo el liderazgo del Centro de Mediación y Arbitraje de la Cámara de Comercio e Industria, la Convención analizará el rol de las instancias de arbitraje de la región en el nuevo contexto que plantea la pandemia del COVID-19, con el intercambio de las experiencias prácticas y lecciones aprendidas, y dando un espacio a analizar los retos a futuro.
Los contenidos a desarrollar permitirán conocer las ventajas de utilizar la herramienta del arbitraje institucional para resolución de conflictos, con base en experiencias vividas durante la pandemia. Sobre las instancias de la mediación y arbitraje recae la labor de resolver las diferencias que podrían surgir en el mundo de los negocios.
El arbitraje institucional es una herramienta para mediar entre las partes que sostienen un desacuerdo sobre la realización de un negocio en particular. Su característica principal es que se rige por una serie de estándares y procedimientos definidos por la instancia de mediación privada, que pone a su disposición la experiencia de reconocidos expertos en la materia. Estar intervención “de un tercero” en la disputa, permite que el la resolución de la controversia se lleve a cabo con fluidez, logrando acuerdos que benefician a ambas partes de manera equitativa.
De acuerdo con el presidente de la gremial, Jorge Hasbún, “la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador ha sido la entidad pionera de este campo en el país, e inclusive ha desempeñado un rol primordial en la elaboración de la Ley de Mediación, Conciliación y Arbitraje”. Por otro lado, el líder gremial celebró que los centros de arbitraje de Centroamérica den la importancia que merece a la transformación de esta disciplina en la región ante los desafíos de la virtualidad, las herramientas tecnológicas y las oportunidades en la nueva realidad que también impactará los procesos de negociación en la actividad económica.
Ante la importancia del tema, con la convención se busca beneficiar, en toda la región, a abogados, estudiantes de derecho, árbitros, practicantes del arbitraje, docentes, gerentes y empresarios que deseen ampliar sus conocimientos en arbitraje comercial, quienes podrán conectarse desde distintos países de la región y el resto del mundo.
Eduardo Oñate, presidente del Centro de Mediación y Arbitraje de la Camarasal, recordó que, desde su fundación en 2002, la instancia ha promovido actividades de formación e intercambio de conocimientos que fortalezcan la disciplina arbitral en el país. “Sabemos que esta décima edición de la Convención nos dará aún más herramientas para que la práctica del arbitraje institucional se vea robustecida en nuestros países”, finalizó.
Durante el evento se realizarán varios paneles con expertos, que abordarán, entre otros, temas como “Recursos y herramientas tecnológicas en el proceso arbitral. El papel de los Centros de Arbitraje en el crecimiento del arbitraje en la Región” y “El arbitraje comercial frente a las causas de exoneración de responsabilidad contractual en el entorno de la pandemia COVID 19”.
Además, se desarrollará la ponencia magistral “Régimen de las pruebas en el arbitraje internacional con la implementación de las herramientas no presenciales” y el foro de árbitros jóvenes de la Cámara de Comercio Internacional ICC/YAF) “Arbitraje on line: una necesidad imperante. ¿Estamos preparados?”
El evento cuenta con el patrocinio de Hogan Lovells, Arias, LPA Legal and Consulting, LatamLex Abogados, García Mirón & Cía, BTA Legal, QIL+4 Abogados, CJA Abogados y Bullard Falla Ezcurra + y Rincón-Cuellar & Asociados.
Sobre el Centro de Mediación y Arbitraje de El Salvador
El Centro de Mediación y Arbitraje (CMA) es una herramienta que la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador ha puesto a la orden de los empresarios salvadoreños como ente idóneo para el desarrollo de los medios alternos de solución de controversias en el ámbito comercial.
La instancia es la única en el país y se rige por la Ley de Mediación y Arbitraje aprobada en 2002 por la Asamblea Legislativa y tiene licencia de operación del Ministerio de Gobernación.